SERIE ANDOR: LA CONCLUSIÓN DE LA HISTORIA

Cuando la primera temporada de Andor estrenó en el otoño boreal de 2022, los realizadores y el elenco no sabían qué esperar del público. “Empecé a desarrollar la historia de la serie hace seis años, y luego la hicimos en nuestra propia burbuja – cuenta el creador y productor ejecutivo Tony Gilroy–. Estábamos en Londres y sentíamos que nadie nos prestaba atención. Estuvimos tan encerrados durante tanto tiempo que realmente no sabíamos lo que teníamos. Nos sorprendimos cuando la armamos al final y pudimos ver lo que habíamos hecho”.

El público respondió bien al tono realista de la serie y al elenco de nuevos personajes, y el reconocimiento de la crítica y las ocho nominaciones al Emmy® fueron experiencias tan emocionantes como conmovedoras para Gilroy y su equipo. “La profundidad de las conversaciones que la gente tenía sobre esta serie no se parece a la de ningún otro proyecto en el que haya trabajado. El hecho de que realmente la entendieran fue lo más gratificante” –comenta Gilroy–.

La reacción a la primera temporada fue el impulso que necesitaba la visión que Gilroy tenía para el arco de la serie. “Siempre llamamos a la primera temporada «la formación de Cassian Andor», de alguna manera. ¿Quién es él? Un don nadie desilusionado y amargado. Pero sabemos que, al final, lo vamos a convertir en un héroe épico” –dice Gilroy–.

La formación de Cassian, a su pesar, está impulsada por los encuentros que se producen en la primera temporada, con Bix (Adria Arjona), Vel Sartha (Faye Marsay), Cinta Kaz (Varada Sethu) y el arquitecto de la rebelión, Luthen Rael (Stellan Skarsgård), que trabaja junto a la senadora Mon Mothma (Genevieve O’Reilly). Todos estos personajes le enseñan valiosas lecciones sobre lo que es luchar por algo más grande que uno mismo. Su experiencia también se ve marcada por sus roces con el Imperio, que lo ponen en la mira de Dedra Meero (Denise Gough) y Syril Karn (Kyle Soller). “Aunque esta serie se llama Andor, trata en gran medida sobre el conjunto de personajes que luchan por lo que creen que es lo correcto –comenta Gilroy–. La manera en la que esas historias se entrelazan y dan impulso tanto a la rebelión como al Imperio es el núcleo de nuestra segunda temporada”.

Cassian, que ahora entiende que tiene un papel en la rebelión, está más preparado para comprometerse por completo con la causa. “Pasa de no estar involucrado a tener una actitud casi de soldado al final de la primera temporada, o como si hubiera firmado los papeles de alistamiento, por así decir –explica Gilroy–. En la segunda temporada, el paso es hacia convertirse en un líder, y luego, en un héroe. La segunda mitad de la serie trata de todas las responsabilidades, los sacrificios y el camino hacia llegar a eso”.

El protagonista y productor ejecutivo Diego Luna comenta: “Cassian tiene que entender que esto es un compromiso de por vida. Una vez que decides luchar y provocar un cambio, no hay nada más importante que eso. En toda revolución se trata de lograr el objetivo. Ya no se trata de uno mismo. Sabemos que Cassian llega a ROGUE ONE, pero estamos por descubrir lo difícil que fue ese camino”.

Esta temporada abarca un extenso período de cuatro años de historia y muestra el crecimiento de Cassian hasta convertirse en el héroe que finalmente hará el máximo sacrificio para robar los planos de la Estrella de la Muerte, allanando el camino para los acontecimientos de UNA NUEVA ESPERANZA. “Conocer el lugar al que vas a llegar es lo más liberador que hay –afirma Gilroy– . Significa que puedes moverte con total libertad dentro de los límites de ese marco. Sabemos cómo termina, y eso libera todo lo demás”.

Aunque su destino ya estaba escrito, la idea de completar su recorrido como Cassian Andor fue agridulce para Luna, que comenta: “Me siento muy orgulloso de la serie que hicimos. Cuando hablé por primera vez con Tony, teníamos una idea, y se trataba de crear algo significativo dentro del universo de STAR WARS, algo que fuera una oportunidad para llevar este universo a un tono diferente”.

Concentrar cuatro años de historia en 12 episodios fue un desafío emocionante para los realizadores, algo que ofreció oportunidades interesantes para explorar nuevas formas de narrar. “Esta temporada retoma la historia un año después de los acontecimientos de la primera, y sabíamos que teníamos que llegar a ROGUE ONE – comenta el creador Tony Gilroy–. La cantidad de historia que teníamos que contar era realmente abrumadora”.

Para Gilroy, encontrar el equilibrio entre ofrecer suficiente contexto sobre lo que ocurrió en los momentos que el público no ve, y confiar en que sabrán llenar los vacíos, fue un desafío creativo estimulante. “Sabíamos que teníamos que cubrir esos cuatro años, así que fue una propuesta creativa interesante preguntarse: ¿Qué pasaría si nos dedicáramos a uno por año? ¿Qué haces con todos esos espacios negativos?”.

Los episodios muestran los eventos más determinantes de cada año, que terminan marcando el camino de Cassian hasta convertirse en líder rebelde y, finalmente, en héroe. La historia misma fue una enorme fuente de inspiración para la manera en la que los realizadores dieron forma a su relato. “La historia es cíclica y se repite: hubo incontables revoluciones y rebeliones, y también imperios que surgieron y cayeron con el tiempo –dice Gilroy–. Nuestra serie se inspira en seis mil años de historia que dan sustento a lo que contamos. Queremos narrar una historia que se sienta real y verdadera, solo que transcurre en una galaxia muy, muy lejana”.

Para Gilroy y los guionistas de esta temporada, era fundamental que cada episodio estuviera pensado para hacer avanzar la historia, y eso implicaba adoptar una filosofía clara: no explicar esos espacios negativos con exposición innecesaria. “¿Qué pasó en ese año que realmente necesitas saber, y cuál es la forma más rápida en la que puedo contártelo? –dice Gilroy–. Lo primero que escribimos, de hecho, fueron los comienzos y finales de cada bloque, para asegurarnos de que los saltos temporales fueran coherentes”.

Esta estructura no solo representó un desafío interesante para los realizadores, sino que también influyó en la forma en la que los actores y artistas se prepararon para sus roles en el set. “La estructura narrativa de la segunda temporada fue muy específica en cuanto a todo el trabajo de preparación que tuvimos que hacer con los directores, los otros actores, los diseñadores. Esa preparación consistía en responder todas las preguntas antes de llegar al set –cuenta Luna–. Preguntas como: «¿qué fue lo que pasó?, ¿por qué hace esto el personaje?, ¿por qué empieza acá?, ¿por qué usa esa ropa?». No se trata de improvisar, sino de partir de un lugar. La historia se lo merece”.